EFE, ADN.
La obra del arquitecto valenciano que cambió la imagen de Nueva York, Rafael Guastavino, da la bienvenida al visitante neoyorquino en el Aeropuerto de Valencia con motivo de la reciente inauguración de la línea que conecta ambas ciudades.
La exposición, según explican en un comunicado fuentes de la Generalitat, es fruto de un acuerdo de colaboración entre el Consorcio de Museos y la Federación de Empresas de la Comunidad Valenciana de Contratistas de obra pública (FECOVAL) para promoción de la figura de este importante arquitecto valenciano.
Rafael Guastavino Moreno (Valencia, 1842) está considerado uno de los arquitectos españoles de mayor proyección internacional, sobre todo en Estados Unidos gracias a sus innovaciones técnicas.
Es autor de más de 1.000 edificios y en su conjunto más de 3.000 intervenciones en Estados Unidos, en su mayor parte en Nueva York, como el Metropolitan Museum, la Columbia University, la Grand Central Terminal o el Federal Reserve Bank.
La muestra de Guastavino, a quien The New York Times describió en su necrológica en 1908 como el arquitecto de Nueva York, la integran por 120 fotografías actuales e históricas, y material documental norteamericano de alcance global que refleja el momento histórico en el que el arquitecto y su compañía desarrolló su actividad.
Esta exposición ya obtuvo una gran acogida entre el público en su inauguración y estuvo expuesta en la sala gótica del Centro del Carmen durante los primeros meses del año cuando el museo batió récords de asistencia al superar los 60.000 visitantes.
Guastavino se trasladó a Barcelona en 1861 para comenzar sus estudios en la Escuela de Maestro de Obras de la Ciudad Condal y comenzó su trayectoria profesional como constructor y arquitecto en 1866, antes de haber terminado sus estudios.
Según la comisaria de la exposición, Mar Loren, "sus primeras obras responden al acelerado crecimiento de la ciudad y su despertar industrial, concentrándose en el mercado de las arquitecturas residenciales burguesa del ensanche y en la construcción de contenedores para las nuevas actividades industriales".
Su llegada a Estados Unidos con su hijo en 1881, la fundación de su propia compañía constructora en 1888, la modernización del sistema tabicado cerámico y su proyecto empresarial desembocan en la reinvención de un nuevo tipo de espacios públicos, con sus formas cerámicas abovedadas, que cualifican el espacio colectivo y se introducen en la nueva realidad estadounidense.
En 1883 comenzó su carrera profesional en Estados Unidos y dos años más tarde de fundar su compañía abrió su propia fábrica de productos cerámicos, manteniendo durante los primeros años la doble actividad profesional de arquitecto y constructor.
"Los Guastavino son testigo de la redefinición de la identidad nacional que tiene lugar en el cambio del siglo XIX al XX, con un cambio profundo de su población que se caracterizará por una nueva diversidad étnica y religiosa llegada de todos los rincones del mundo en busca del sueño americano", afirma Loren.
Los espacios que construyó en ese cambio de siglo son ahora parte inseparable de la iconografía urbana americana, consideradas fragmento indiscutible del patrimonio arquitectónico del país.
Fuente: www.arquitectojoven.com
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