miércoles, 6 de junio de 2012

Una obra serena y sostenible

La influencia de Rafael Moneo en la arquitectura extremeña no viene dada sólo por las obras que ha ido construyendo en la región desde que el edificio que diseñó para el Museo Nacional de Arte Romano (MNAR) en Mérida, en 1986, suscitase un gran interés. Su influencia procede del logro conjunto de una obra profesional que conjuga la sencillez con la sostenibilidad hasta conseguir una arquitectura «serena que rebasa los límites del tiempo», en opinión del decano del Colegio de Arquitectos de Extremadura (Coade) Francisco Javier González Jiménez. A su juicio, la obra de Moneo está fuera de modas y de temas de pura actualidad «para trascender e ir más allá».
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La concesión al arquitecto tudelano del Premio Príncipe de Asturias de las Artes ha sido especialmente celebrada por el gremio de arquitectos no sólo por ser otorgado a un maestro sino también por haber sido concedido en un momento especialmente difícil para la profesión, muy afectada por la crisis constructiva. «Es un reconocimiento social al trabajo del arquitecto -dice González Jiménez-, dentro del área de las Artes donde compite con todo tipo de artistas. Y no son escasos los arquitectos, porque el seleccionado anteriormente en 2009 fue Foster».
El decano González Jiménez siente que al ver y ocupar los edificios de Moneo «te invade una sensación de tranquilidad que dan esos espacios tan bien tratados que impresionan por sus proporciones».
Las características del estilo de Moneo parecen prestarse especialmente para los usos culturales que son los predominantes en los edificios que ha hecho en Extremadura. Francisco Javier González Jiménez vive en Don Benito y allí sobresale la Casa de la Cultura de Moneo, inaugurada el 28 de marzo de 1998. Es una de las obras «menores» del nuevo premio Príncipe de Asturias y González Jiménez admite que, en su momento, no gustó a todo el mundo, aunque cree que ha ganado aceptación con el paso del tiempo. «Es una obra muy sencilla en la que no se ha derrochado en materiales ni en nada y cada vez es más reconocida», asegura.
La faceta docente de Rafael Moneo es también destacada por el decano de los arquitectos de Extremadura y vendría del interés por la enseñanza de la Arquitectura que tuvieron algunos de sus maestros, como Saenz de Oiza. «A veces vemos noticias de otros arquitectos que nos sonrojan pero frente a ellas, estas otras noticias nos reconcilian a los arquitectos con la sociedad y a la sociedad con los arquitectos».
Fuente:http://www.hoy.es

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