J.M.S. Precisamente ayer, Día Mundial de la Arquitectura, echaban el telón dos acontecimientos relacionados con esta disciplina en Pekín. Allí, la joven empresa «Aqso», fundada por el arquitecto zamorano Luis Aguirre Manso, daba por finalizada la exposición del proyecto «Hutópolis», un programa de investigación que cuenta con la adhesión de varias universidades europeas y que pretende crear nuevas unidades urbanísticas en China para preservar la comunicación social y el desarrollo sostenible.
El propio nombre del proyecto es una declaración de intenciones. Un juego de palabras entre «huton», un modelo tradicional de construcción china, y «utopía», objetivo loable aunque siempre de complicada conquista. Lo cierto es que «Hutópolis» ha paseado por la capital del gigante asiático sus objetivos a través del Festival de Diseño de Pekín y la feria Trienal de arquitectura de la ciudad. Con el respaldo de una promotora local y la colaboración de centros universitarios de Madrid, Milán y Moscú, los arquitectos de este estudio internacional iniciarán esta particular búsqueda.
El arquitecto zamorano explica que los llamados «hutones» son «una especie de barrios singulares de China, pueblos con una actividad social muy fuerte y un modelo transporte sostenible hacia los que Europa tiende». Aunque estas unidades urbanísticas «se regeneran», Luis Aguirre explica que «lo que demanda la población de China en zonas es un elevado aprovechamiento del suelo para construir grandes bloques de viviendas cerradas donde la comunicación no existe».
Y es que en la práctica, el «huton» está compuesto «por cuatro casas en torno a un patio con árboles al estilo mediterráneo». Esta realidad ha servido de base al programa de investigación, que los responsables del estudio de arquitectura con sede en España y en China han difundido a través de puntos expositivos dispersos en Pekín, dentro de la «Beijing Design Week».
«Hutópolis» no deja de ser una propuesta experimental que corona la actividad de una empresa con muy pocos años de vida. Después de obtener la titulación en Arquitectura en Valladolid, este joven zamorano adquirió experiencia en Italia y en Irlanda para impulsar la empresa que después se embarcaría en la creación de proyectos internacionales junto a otros tres socios.
De hecho, el propio Luis Aguirre reconoce que la situación en España para el sector «es muy difícil», mientras que el gigante Chino «ofrece más oportunidades». Si aquí los encargos se limitan al diseño de edificios, «China nos da más oportunidades en proyectos urbanísticos, porque además de ser productores, quieren que los propios productos se diseñen en el país». Un consejo para futuros emprendedores: «Es bastante recomendable aprender chino, aunque en el ámbito profesional podemos entendernos en inglés», apunta el emprendedor.
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