800 metros cuadrados del país más pequeño del mundo están dedicados, desde hoy, al arquitecto catalán Antoni Gaudí, protagonista de la exposición 'Gaudí y la Sagrada Familia de Barcelona. Arte, ciencia y espiritualidad' en El Braccio di Carlo Magno del Vaticano.
La muestra que enfatiza la espiritualidad del arquitecto, ha sido recibida con todos los honores. El cardenal Ravasi, que tiene una función parecida a la de un ministro de Cultura del Vaticano, ha inaugurado la muestra con una especie de eslogan: "La obra de Gaudí es un paradigma de la unión entre técnica arte y fe".
Y después, ha recordado la complicada historia de La Sagrada Familia: "El hecho que la basílica se empezara a construir en 1812 y aún no haya sido concluida es una parábola de la construcción de las grandes catedrales en la Historia, cuya historia se alargaba durante años, si no siglo y nunca pertenecía a la autoría de un solo arquitecto".
Antoni Gaudí.
El arzobispo cardenal de Barcelona, Lluis Martínez Sistach, también ha asistido al acto y ha abordado el proceso de beatificación de Gaudí. "Para santificarlo falta el milagro. Sería importante que un laico como Gaudí fuese declarado beato y que así se convirtiese en una inspiración para los artistas".
La muestra expone maquetas de la época de Gaudí, planos, muebles, fotografías, audiovisuales y objetos litúrgicos diseñados por el propio arquitecto. El Vaticano también acogerá algunas actividades paralelas que darán a conocer diversos aspectos de la cultura y la Iglesia catalana, como un concierto de la Escolanía de Montserrat y la conferencia 'Arquitectura: símbolo y sagrado', a cargo del presidente del Pontificio Consejo por la Cultura, Monseñor Gianfranco Ravasi.
La exposición --comisariada por Daniel Giralt-Miracle-- iba a ser inaugurada la pasada primavera, pero tuvo que ser aplazada a causa de las actividades relacionadas con la beatificación del Papa Juan Pablo II.
Fuente:http://www.elmundo.es/
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