El plan se basa en una arquitectura simple, signada por un fuerte compromiso con el espacio público que le da entidad a cada intervención por tratarse de obras que marcan la presencia del Estado municipal en los barrios. Todas las Instalaciones comparten una imagen arquitectónica similar para favorecer la rápida identificación de las mismas en sus respectivas localizaciones.
© Federico Cairoli
Desde un punto de vista tipológico, cada edificio se concibe como una trama modular en donde se intercalan los usos programáticos propios y la disposición de los diferentes patios. Esto posibilita la existencia de áreas de expansión y recreación controladas, propias de cada aula, brindando mejores condiciones de seguridad y optimizando el comportamiento bioclimático. Cada aula es un módulo funcional independiente que cuenta con sus propios sectores de apoyo: preparado de biberones, cambiado de mudas y sanitarios para ambos sexos según el requerimiento de la sala.
© Federico Cairoli
Se ha previsto un uso racional de los recursos energéticos, priorizando los medios pasivos de control climático. En función de ello, las aulas se articulan entre sí y con los distintos sectores del jardín por medio de un sistema circulatorio de galerías semicubiertas, pensadas como necesarios espacios de transición. Se incorpora el uso de termotanques solares, con colectores conformados por tubos de vacío, para el calentamiento del agua sanitaria. Se propone, además, la instalación de retardadores en los desagües pluviales con el fin de no saturar el sistema pluvial durante los días de lluvias intensas.
© Federico Cairoli
La materialidad de las obras se resuelve mediante sistemas constructivos tradicionales. Mampostería de ladrillos comunes con terminación de material de frente en muros, cubiertas metálicas en el sector de aulas, de hormigón armado con terminación a la vista en el sector de acceso y galerías y mosaico granítico pulido en pisos. Las obras se destacan por la muy buena calidad constructiva que se procura para las mismas, debido no sólo a las exigencias propias de toda obra pública sino también a la intención expresa de dotar a los barrios que reciben a los jardines de edificios que, a través de su calidad constructiva, expresen el compromiso asumido con la atención de los más pequeños.
© Federico Cairoli
Edificio
La intervención contempla la puesta en valor del solar existente y la integración del nuevo Jardín Municipal, a partir de la construcción anexa existente.
© Federico Cairoli
Se plantea un nuevo acceso, en relación directa con el espacio público inmediato, a través de una galería vinculada directamente al patio central que unifica las distintas áreas y a su vez genera un espacio de encuentro cualificado. La forestación y plantación de especies arbóreas en este sector juega un papel importante en la calidad ambiental del patio.
Planta
La primera etapa contempla el nuevo ingreso al complejo y la construcción de una sala de 1 año con sus apoyos (preparado de mamaderas y cambiado de pañales), un sector de administración y hall.
Plano
La segunda etapa de proyecto prevé la construcción de una sala de 2 años y una sala de 3 años con su respectivo apoyo (sanitario, Preparado de mamaderas y cambiado de pañales). Esta etapa termina de configurar los límites del Jardín y el completamiento del solar en cuanto a su referencia urbana. Sobre la esquina sur del sector, se conforma un espacio verde público cualificado como lugar de encuentro de escala barrial.
Elevación
Fuente: http://www.plataformaarquitectura.cl/
No hay comentarios:
Publicar un comentario