© Joao Morgado – Architecture Photography
Arquitectos: Paulo Merlini
Ubicación: Porto, Portugal
Año: 2013
Fotografías: Joao Morgado – Architecture Photography
Corte
La forma poco común, la estrechez, la amplitud vertical del espacio y las dos grandes fachadas de cristal colocadas en la fachada principal y posterior, definen principalmente la organización de los espacios.
© Joao Morgado – Architecture Photography
La recepción y sala de espera se caracteriza por una gran caja blanca que flota en el aire jugando con la amplitud vertical del espacio. El interior de la caja mimetiza la idea de estar bajo un techo, dando al usuario una sensación familiar de comodidad, y ayudándolo a calmarse antes del tratamiento. Desde el “techo”, una serie de lámparas flotan en el aire, llenando el espacio con luz. La caja flotante detiene la luz y el calor excesivos, procedentes de la fachada principal hacia el final del día. Por otro lado su gran masa empuja el resto de los espacios de trabajo hacia la fachada posterior. Esta recibe una gran luz cenital, con las condiciones ideales para trabajar.
© Joao Morgado – Architecture Photography
Bajo la escalera una pared de espejo crea la ilusión de un espacio más amplio, resolviendo la sensación de estrechez que se podía sentir al entrar en la sala.
© Joao Morgado – Architecture Photography
Una escalera muy angosta y elegante nos guía a una sala de descanso/espera en la planta superior. ¿Dónde podemos encontrar una ventana colocada a nivel de los pies? esto crea una fuerte relación visual con la planta baja dejando ver las luces de arriba. Desde la perspectiva de la entrada la ventana es un elemento muy importante, ya que conduce a los ojos del observador en una posición diagonal. Este movimiento de la cabeza refuerza la importancia de la caja flotante, y en el otro lado rompe con el cerramiento de la caja, dando al usuario la noción real de todo el espacio.
Planta baja
En la sala de estomatología el usuario se coloca frente a una cortina de vegetación. La idea es crear una distracción basado en el movimiento de las hojas, de modo que el paciente pueda centrarse en algo más que el propio tratamiento, esperando la disminución de cualquier sensación desagradable causado por éste.
Fuente:http://www.plataformaarquitectura.cl/
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