jueves, 3 de mayo de 2012

Arquitectura nueva para arropar la cansada

7554_03
“Pensamos el edificio como un fragmento, casi como un muñón”. Con la estrategia de limpiar los añadidos y aceptar el edificio histórico como origen, concediéndole el atributo de obra inconclusa, Iñigo de Viar  amplió las antiguas casas consistoriales para ubicar las nuevas oficinas del Ayuntamiento de Baeza, en Jaén.
Su idea era diseñar una nueva construcción para envolver parcialmente la existente. En este nuevo inmueble, en la nueva capa que representa la intervención, ha sido la ciudad, y no el edificio histórico original, el que ha indicado las directrices y ha  apuntalado la actuación. Así, como un elemento orgánico, la nueva estructura envuelve y arropa los patios. También hace crecer el antiguo inmueble como ha crecido, históricamente, la propia ciudad: por agregados, sumando cuerpos  en relación fraternal. En palabras del arquitecto “como un hijo que arropa a su padre cansado”. El resultado es una suma de contrarios: vacíos y llenos, sombras y luces, celosías y opacidades, ocre sobre fondo blanco.
El arquitecto Íñigo de Viar habla de tres grupos:
-Lo existente (el edificio histórico que contiene el salón de plenos, la alcaldía, las oficinas de los grupos políticos y una sala de exposiciones y conferencias).
-Lo nuevo (con área administrativa y otra de atención al público).
-Y el vacío, igualmente importante (donde se ubican la zona de espera y el distribuidor).
Partiendo de esa suma de opuestos, de Viar explica que en Baeza la piedra es monumento y lo blanco enmarca ese valor. Por eso su edificio nuevo es blanco, y por eso, desde su novedad, actúa de refuerzo del pasado valorando lo existente. Por eso esta restauración es un trabajo de humildad, pero a la vez un ejercicio técnico, una labor de limpieza y finalmente una reparación. En la parte nueva del Ayuntamiento la mayor ampliación se concentra en el edificio de oficinas. Allí, los cierres de las sillerías de las grandes iglesias españolas le dieron al arquitecto la idea para las celosías que mezclan el cierre de las cancelas con el dorado, la vibración óptica del op art con los reflejos y las luces con las sombras. Una escalera negra colgada resuelve la comunicación vertical y en el patio, junto a algunos cipreses y limoneros, el agua brota de una grieta.
7554_46
7554_38
Fuente:http://blogs.elpais.com/

No hay comentarios: